No era el primera partido de Jiménez en el banquillo sevillista. El de Arahal ya ha tenido tiempo para coger acomodo y asumir de una vez por todas las responsabilidades que contrae un equipo de tal nivel como el Sevilla. Este equipo no es el de hace unos años. Este Sevilla no es el de mitad de la tabla, el del pelotazo ni el del conformismo. No. Este Sevilla es el Sevilla ganador, ambicioso y acaparador. El equipo que lo quiere todo y lucha por todo. Así lo quiso Juande Ramos que durante dos años consiguió una máquina de ganar. Una trituradora que devoraba todo lo que se encontraba a su paso y que no se arrugaba ante nada.
Hoy hemos podido ver lo que durante varias semana se viene intuyendo: un Sevilla mediocre. Un equipo capitaneado por Manolo Jiménez y que cada día baja un escalón más de esa cúspide en la que estaba subido. El conjunto hispalense ha hecho un buen trabajo en el Camp Nou, teniendo en cuenta las circunstancias; pero sin duda, su entrenador no ha estado a la altura de las exigencias, como lleva ocurriendo desde que se hiciera con el mando de la nave sevillista.
Es cierto que su victoria ante el Real Madrid y Arsenal pachearon un poco su trabajo. Pero no todos los equipos a los que se enfrentan los sevillistas son el Madrid y el Arsenal. Y además, habría que preguntarse ¿si esas victorias se consiguieron gracias a su trabajo o al de los propios futbolistas? Este Sevilla tiene un plantillón y cuando juega es gracia a la calidad de sus jugadores y no de su entrenador que se ha plantado hoy en Barcelona con un claro objetivo: no recibir ningún gol. Pero a Manolo Jiménez se le olvidó un importante detalle: para ganar la eliminatoria tenía que meter un tanto. El de Arahal creía que estaba ante un partido liguero más que ante una ronda eliminatoria. Pensaba que el empate valía para algo, al menos esa fue la impresión que me mostró cuando sacó a Chevantón, Luis Fabiano y al activísimo Capel del terreno de juego.
¿Qué vale más? ¿Perder por tres a cero y luchar hasta el final con todo el arsenal o dejar la portería a cero y dar una buena imagen? “Lo que más me duele es que no hemos perdido ningún partido”. Sí lo has perdido Jiménez. Tú planteamiento conservador ha dejado al vigente Campeón en la cuneta. Ni Caparrós hubiera hecho hoy lo que tú has realizado... todavía me acuerdo de esa mítica noche ante el Panathinaikos donde, con la eliminatoria perdía, jugó con cinco delanteros: Makukula, Dario Silva, Aranda, Antoñito y Carlitos. ¡Qué tiempos! Se la jugó y ganó. ¿Sabés por qué? Porque el de Utrera fue valiente. No como tú Sevilla, el de Manolo Jiménez. Eso es lo que les duele a los sevillistas, el no haber visto a su equipo luchar por ganar al Barcelona.
Es hora de que Del Nido y su tropa, al que le esta viniendo grande este Sevilla de Champions, reaccione. Jiménez no es entrenador de un equipo de tal calibre y con jugadores de tanta calidad. Juande Ramos supo pulir el diamante que le dejó Caparrós y contribuyó con la trayectoria exitosa del Sevilla. Jiménez quiere mostrar su carácter cargándose todas las cosas buenas que dejó el manchego. Quiere marcar las diferencias con el manchego y la maniobra no le esta saliendo nada bien: cada día que pasa hace más grande al de Pedro Muñoz. No sólo basta con ser sevillista ni con ser alusión a esa garra y coraje. No, Jiménez. No, Del Nido.
Y lo peor de todo, es que el de Arahal nunca tiene la culpa de nada. Cuando pierde, la culpa son de los jugadores y de la actitud. Cuando se empata de las bajas y de las ausencia. Y cuando se gana... ¡Qué más da! ¿Hasta cuándo piensan aguantarlo? El Sevilla tiene todavía tiempo para salvar la temporada con un buen papel en la Champions League y realizando un gran spring liguero. Directiva sevillista, ¿queréis seguir tirando esta temporada?
Hoy hemos podido ver lo que durante varias semana se viene intuyendo: un Sevilla mediocre. Un equipo capitaneado por Manolo Jiménez y que cada día baja un escalón más de esa cúspide en la que estaba subido. El conjunto hispalense ha hecho un buen trabajo en el Camp Nou, teniendo en cuenta las circunstancias; pero sin duda, su entrenador no ha estado a la altura de las exigencias, como lleva ocurriendo desde que se hiciera con el mando de la nave sevillista.
Es cierto que su victoria ante el Real Madrid y Arsenal pachearon un poco su trabajo. Pero no todos los equipos a los que se enfrentan los sevillistas son el Madrid y el Arsenal. Y además, habría que preguntarse ¿si esas victorias se consiguieron gracias a su trabajo o al de los propios futbolistas? Este Sevilla tiene un plantillón y cuando juega es gracia a la calidad de sus jugadores y no de su entrenador que se ha plantado hoy en Barcelona con un claro objetivo: no recibir ningún gol. Pero a Manolo Jiménez se le olvidó un importante detalle: para ganar la eliminatoria tenía que meter un tanto. El de Arahal creía que estaba ante un partido liguero más que ante una ronda eliminatoria. Pensaba que el empate valía para algo, al menos esa fue la impresión que me mostró cuando sacó a Chevantón, Luis Fabiano y al activísimo Capel del terreno de juego.
¿Qué vale más? ¿Perder por tres a cero y luchar hasta el final con todo el arsenal o dejar la portería a cero y dar una buena imagen? “Lo que más me duele es que no hemos perdido ningún partido”. Sí lo has perdido Jiménez. Tú planteamiento conservador ha dejado al vigente Campeón en la cuneta. Ni Caparrós hubiera hecho hoy lo que tú has realizado... todavía me acuerdo de esa mítica noche ante el Panathinaikos donde, con la eliminatoria perdía, jugó con cinco delanteros: Makukula, Dario Silva, Aranda, Antoñito y Carlitos. ¡Qué tiempos! Se la jugó y ganó. ¿Sabés por qué? Porque el de Utrera fue valiente. No como tú Sevilla, el de Manolo Jiménez. Eso es lo que les duele a los sevillistas, el no haber visto a su equipo luchar por ganar al Barcelona.
Es hora de que Del Nido y su tropa, al que le esta viniendo grande este Sevilla de Champions, reaccione. Jiménez no es entrenador de un equipo de tal calibre y con jugadores de tanta calidad. Juande Ramos supo pulir el diamante que le dejó Caparrós y contribuyó con la trayectoria exitosa del Sevilla. Jiménez quiere mostrar su carácter cargándose todas las cosas buenas que dejó el manchego. Quiere marcar las diferencias con el manchego y la maniobra no le esta saliendo nada bien: cada día que pasa hace más grande al de Pedro Muñoz. No sólo basta con ser sevillista ni con ser alusión a esa garra y coraje. No, Jiménez. No, Del Nido.
Y lo peor de todo, es que el de Arahal nunca tiene la culpa de nada. Cuando pierde, la culpa son de los jugadores y de la actitud. Cuando se empata de las bajas y de las ausencia. Y cuando se gana... ¡Qué más da! ¿Hasta cuándo piensan aguantarlo? El Sevilla tiene todavía tiempo para salvar la temporada con un buen papel en la Champions League y realizando un gran spring liguero. Directiva sevillista, ¿queréis seguir tirando esta temporada?
P.D.: Otro día hablaremos de la pésima planificación deportiva que está realizando el Sevilla. Os recuerdo un dato: el mercado de invierno sigue abierto.
3 comentarios:
La verdad esq viendo la primera parte de ayer....para nada me recordó al sevilla campeón al q estams acostumbrados.
lo cierto es q a jimenez se le acaba el credito y está coleccionando papeletas pa q la buskeda de un entrenador pal año q viene sea cada vez más cantada.
Fernan_Ronda
Escribo tras unos dias para no pagar aqui todo el mosqueo pillado tras la finalizacion del encuentro. En contestacion al comentario anterior a mi tampoco me recordó al equipo campeon que tanto nos costo forjar, y que aunque no quiera reconocerlo volvemos a los tiempos no tan antiguos de casi le metemos un susto, del que nos podemos sentir contentos de que al menos hemos caido con un barcelona etc, tambien opino que a jimenez esto le viene grande pero no le echo entera la culpa a él porque creo que se a comido el marron y lo han querido meter ahi con calzador y el salto es demasiado grande y la presion mucha todo por ser la opcion mas barata y me temo que por este forma de proceder se va a cargar toda la progresion que venia haciendo con el equipo filial, con el cual hubiese ido cogiendo experiencia, algo tan importante en el futbol de hoy dia.
PD: Eso sí, el planteamiento echo en el camp nou es digno de mencion, alguien le tendria que haber dicho que con el empate no ganamos un punto y si estabamos eliminaos. Lo digo por la actitud de no recibir del equipo antes que marcar y por los cambios hechos en el transcurso del mismo
La culpa no es suya a medias. Claro está que Jiménez se esta comiendo un marrón, y bastante gordo. Pero las alineaciones y los cambios no creo que lo decida Del Nido. Su planteamiento en el Camp Nou fue rácano y el Barça sin hacer nada superó una eliminatoria que en el cómputo general el Sevilla ha sido mejor.
Jiménez soñó siempre con entrenar al Sevilla, pero no a este Sevilla. Seguro que algún día, una vez que se haya ido, volverá a coger a este equipo y espero que llegue en su momento porque se merece triunfar en este club. La pena es que al de Arahal todavía no le ha llegado la hora de entrenar el Sevilla y sin embargo la directiva lo ha puesto en el banquillo sí o sí. Todo sea por tener el mejor un estadio cinco estrella!!!
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