Levante 0Sevilla 2
El partido frente al Levante se había convertido en casi una final para el conjunto nervionense. Una quinta derrota consecutiva hubiera sido un palo muy gordo para la parroquia sevillista, donde ya empezaban a aparecer los fantasmas del descenso comparándose con la temporada de Marcos Alonso en el banquillo. Por ello, el Sevilla salió a por todas en una primera parte en los que los granotas no inquietaron en ningún momento a Palop. El sistema de De Biasi hacia aguas y los sevillistas convirtieron el primer tiempo en un monólogo en el que Luis Fabiano fue el protagonista. Fue el propio delantero sevillista quien abrió la lata, tras un gran pase de Dani Alves, que lo dejó sólo en el área con un defensa y el portero. El delantero se revolvió, superando a Álvaro, y lanzó un balón, muy cerca del portero lenvantino, que se metía en las mallas. Era el minuto seis y los de Juande Ramos ya estaban por delante en el marcador. En esta ocasión, los sucesivos ataques sevillistas tuvieron más premio y el árbitro pitó un penalti a favor de los nervionenses tras un tiro de Duda que se estrelló en el antebrazo de Descarga. Llegó el segundo tanto de la mano, de nuevo, de Luis Fabiano, quien realizó un gran partido. La dinámica de la contienda seguía siendo la misma: Adriano estrellaba el balón frente al portero, Renato fallaba sólo ante el guardameta, Koné se perdía en el área,… Tan sólo un tiro lejano de Viqueira hizo que los levantinos soñaran con algo más que una derrota.
Una gran victoria para los de Nervión, quienes se pasearon en la segunda parte con el fin de dosificar esfuerzos para el partido del martes frente al Steaua de Bucarest, que despeja algunas dudas y que le da tranquilidad, al menos unos días, a la plantilla nervionense. Por último, la anécdota del partido fue el regreso de Chevantón, quien poco pudo hacer en un momento donde la mayoría de sus compañeros pensaban más en la Champions que en el partido que se estaba disputando en el Ciudad de Valencia.
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